Cuidado del suelo
La rotación adecuada en tiempo y forma, evitando el sobrepastoreo y nº de animales inadecuado, hace que las raíces no se agoten y estén centradas en el crecimiento y en el rebrote de las plantas.
El pastoreo controlado hace que las plantas siempre tengan parte foliar aérea y por tanto siempre hay superficie para la fotosíntesis. El animal pasa pastando y estercolando las praderas aportando materia orgánica que los pisoteos, coprófagos y la lluvia se encargarán de aportar al suelo. Este aporte de materia orgánica y el tiempo de descanso adecuado junto con la estimulación del pastoreo, hacen que la planta rebrote con más fuerza acelerando el alimento de la siguiente pasada.

Se crea un sistema energético muy eficiente que proporciona sustento al suelo y al animal con un resultado clarísimamente beneficioso. La superficie de pastos es mayor cada año y con ello aumentamos la superficie cubierta y por tanto nuestra capacidad de fijación de CO2.
Beneficios de un sistema de rotación y pastoreo:
1. Aumenta estructura del suelo con las raíces y la materia orgánica.
2. Aumenta actividad microbiológica del suelo.
3. Aumenta la capacidad de retención de agua por la estructura interna y por la menor evapotranspiración existente al no haber suelo desnudo.
4. Se disminuye la erosión de la tierra por la escorrentía.
5. Aumenta la capacidad fotosintética de las plantas al haber más tiempo hojas transformando energía en nutrientes.
Se planifica todo en función de los consumos que tenemos en la finca para la alimentación animal.
Los animales se comen los rastrojos y apuran resto de parcelas para estercolar lo máximo posible. Son la fuente de materia orgánica necesaria para mayorar el balance de consumo.

Compost
La gran ventaja de criar animales en nuestra finca es que éstos nos proporcionan la base (estiércol) para su elaboración de esta materia orgánica, imprescindible para enriquecer nuestros cultivos. El compost se hace a base de estiércol de las ovejas que recogemos del aprisco, el que se recoge en la zona de cebo de los chotos, de la zona cubierta de los parques de finalización de cebadero, caballos y gallinaza de las naves de pollos y gallinas al moverlos.

Aprisco de las ovejas.
Se aporta al montón, cuyo manejo necesita de un control de temperatura, humedad y volteo. Además, en otro punto cercano a la huerta, compostamos los residuos orgánicos domésticos.

Praderas Permanentes
En Dehesa El Milagro aumentamos las praderas permanentes para ser pastoreadas. Tierras arables se siembran con praderas permanentes y se refuerzan con diferentes cultivos utilizando siembra directa para no romper la estructura generada.
Lo que hacemos para semillar la parcela es esperar a que la pradera se seque. Introducimos el ganado y, simplemente con el forraje que se comen, el pisoteo y el abonado por estiércol que ellos producen conseguimos que al año siguiente brote con muchísima más fuerza y calidad.

Trébol encarnado, mejorante del suelo.